martes, noviembre 28, 2006

Rutinas

Hay días buenos y días malos. Días que concluyen con una sonrisa en los labios, o con los ojos anegados en lágrimas. Días dorados. Días negros. Días en los que me apetece vivir eternamente y días en los que rezo para que no exista un Dios que me regale otra vida después de ésta. Existen días que duelen, días que ríen (a veces conmigo, a veces de mi), días que sueñan. Hay días que me besan y su sabor me recuerda al tuyo, días que me ponen una almohada en el rostro para impedirme respirar. Hay días que buscan en otros días pasados, y días que imaginan días que nacerán. Hubo un día que me robó el amor, y aún espero que un compañero suyo me lo devuelva. Hay días de feria, días de luto, días de otoño, días en los que todo huele bien.


Pero hoy el día no ha querido mostrarse y ha pasado de puntillas mirándome de soslayo, silenciosamente, sin decirme nada. Y yo no me he enterado...

lunes, noviembre 27, 2006

Bucle infinito

Cuando el niño vio como aquella estrella fugaz surcaba el cielo puedo haber deseado convertirse en montaña para vivir miles de años albergando vida en su ladera, o en árbol para existir más de un siglo en la espesura de un bosque, o en riachuelo para viajar de un lado a otro. Pero deseó ser estrella fugaz para poder concederle un deseo a otro niño, que pudo haber deseado convertirse en montaña para vivir miles de años...

martes, noviembre 21, 2006

Aprenderé a nadar

Deseo. Miedo. Afecto. Luz. Cenizas. Arroz. Gritar. Amor. Ahora. Amistad. Dolor. Antes. Escribir. Después. Jabón. Sonrisa. Cuándo. Columpio. Fe. Rechazo. Palmas. Compañerismo. Azul. Rostro. Tibio. Caricia. Silencio.


La vida secreta de las palabras



Algo ha vuelto a mí después de mucho tiempo y me ha emocionado como la primera vez.


-Yo aún no sé qué hacer, lo estoy pensando.

-Bien

-He pensado que… tú y yo… podríamos ir a algún sitio juntos. Uno de estos días. Hoy. Ahora mismo. Ven conmigo.

- No, yo… creo que no va a ser posible.

-¿Por qué no?

- Ahm…Porque si decidiéramos irnos a algún lugar juntos me da miedo que un día… hoy no, quizás, quizás mañana tampoco, pero un día, de repente, puede que empiece a llorar y llorar y llore tanto que nada ni nadie pueda pararme y que las lágrimas llenen la habitación y que me falte el aire y que te arrastre conmigo y que nos ahoguemos los dos.

-Aprenderé a nadar. Te lo juro. Aprenderé a nadar.




P.d. Estoy guardando en una cajita todos los besos que no me das. Yo también aprenderé a nadar.

lunes, noviembre 13, 2006

Granada

Granada me coge de la mano y me enseña sus rincones...

Recién llegada, con resaca de Alhambra, de callejuelas empedradas, de cerveza fresca, de fachadas blancas y aroma a incienso...


Os cuentos en los próximos días...