martes, noviembre 28, 2006

Rutinas

Hay días buenos y días malos. Días que concluyen con una sonrisa en los labios, o con los ojos anegados en lágrimas. Días dorados. Días negros. Días en los que me apetece vivir eternamente y días en los que rezo para que no exista un Dios que me regale otra vida después de ésta. Existen días que duelen, días que ríen (a veces conmigo, a veces de mi), días que sueñan. Hay días que me besan y su sabor me recuerda al tuyo, días que me ponen una almohada en el rostro para impedirme respirar. Hay días que buscan en otros días pasados, y días que imaginan días que nacerán. Hubo un día que me robó el amor, y aún espero que un compañero suyo me lo devuelva. Hay días de feria, días de luto, días de otoño, días en los que todo huele bien.


Pero hoy el día no ha querido mostrarse y ha pasado de puntillas mirándome de soslayo, silenciosamente, sin decirme nada. Y yo no me he enterado...

6 Comments:

Blogger aqua said...

Esos días, los que pasan de puntillas, en los que los relojes pretenden hacerse omnipotentes, distorsionado la dimensión y alterando nuestro pulso. Esos, esos són los que requieren de una pausa, un pasar por un espejo y mirarnos en él. Aprender a leer nuestra própia imagen, leer la fortuna de la que gozamos, aprender a ser humildes con la felicidad, entender que las ironias de la vida, són eso....sus ironias, y que hay mil quinietas setata y dos razones para sonreir y no malgastar ni una lágrima más por motivos banales o por personas hechas nuestro capricho.
Ahí va un mega abrazo cariñoso y un besazo tierno.
P.D. porfa! se feliz, la sonrisa te viste mejor ;-)

1:30 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Me gustaría decirte algo que estuviera a la altura de tus palabras, pero pasa el tiempo y sigo pensando delante del ordenador para escribirtelas...y no las encuentro.
Qué manera de trasmitir lo que sientes... Precioso post, de verdad

8:37 p. m.  
Blogger Pequer said...

El tiempo ... es paradójico que algo que está tan matemáticamente medido y controlado con relojes super tecnológicos sea tan inconsistente y dependa del estado de ánimo para sentir que 10 minutos son una eternidad cuando anhelas a alguien y tan breve un día cuando estas con esa persona.

Pero sabes, los dias dorados no necesitan consejos ya te llenan ellos solos, y para los negros ... pues acuerdate de los dorados y pasarán rápido.

Besu.

11:48 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Besos a cada uno de tus días.
Hasta al de ayer.

8:37 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Parece que estás viviendo días como los míos.
Me alegro de volver a saber de tí y de que vuelves a escribir. Siempre eran un regalo tus letras. He estado un tiempo apartado pero creo recuperar la rutina.
Un saludo.

12:23 p. m.  
Blogger Llaeza said...

Aquasuki, tienes razón. Las lágrimas, para ocasiones especiales. Ni una derramada en balde. La nostalgia no le queda bien a nadie, también es cierto. Siempre es agradable tenerte por aquí. Muchas gracias. Beso cálido.

Wendy Gracias, de veras, me emocionan tus palabras. Poco más tengo que decirte, sólo te abrazo.

Pequer Vale. Cierro los ojos. Me acuerdo de los dorados. Estoy en San Pedro. El mar de fondo. Silencio. Y una cabeza en mis rodillas. Ya sonrío ;)

Besu enorme enorme

GlupDeja mis días y besa mi frente, anda, que lo prefiero ;)

MUAC

Jose No sabes cuánto me alegra tu vuelta. Espero de veras que estés bien.

Un abrazo

9:38 p. m.  

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